Cómo escoger la faja adecuada
Lo que debes considerar al escoger tu faja:
Una primera consideración que debes tener es que la faja ideal es aquella que no se nota por debajo de la ropa. Elige costuras invisibles y telas finas que puedan esconderse fácilmente por debajo de las prendas.
Fajas colombianas
Debes definir exactamente para qué la quieres, bien sea por estética o por salud. Ambos tipos de fajas son muy distintas, tanto en composición como en materiales y comportamiento. No es lo mismo una faja para modelar el abdomen, que para corregir la postura
En segundo lugar, debes elegir la talla adecuada para ti. Ten en cuenta que las fajas vienen en distintos niveles de compresión dependiendo de la elasticidad de su material. Elige una que puedas tolerar.
Ten en cuenta que la idea es que te veas bien, pero también debes sentirte cómoda. Si eliges una talla muy baja, además de que puedes maltratarte, la presión que ejerza puede hacer que tus músculos se atrofien.
Igualmente, debes elegir el tipo de faja que te permita comprimir la zona en la que te deseas enfocar. Si quieres comprimir el abdomen utiliza una faja que termine justo debajo del sostén. Si por el contrario quieres moldear tus caderas, una tipo panty sería la mejor opción. Cuando deseas moldear tus piernas por debajo del pantalón, es mejor un corte pescador para que no se note la faja en el corte de los muslos.
Las recomendadas al momento de elegir tu faja
En cuanto a las telas, siempre es mejor escoger fajas de algodón o neopreno, puesto que las fajas de licra tienden a irritar la piel con el uso prolongado. También siempre es recomendable escogerlas con soportes de varillas de aluminio o plástico, siempre que estén recubiertos, puesto que dan soporte a los órganos y permiten mayor movilidad.
Recuerda que la faja no hará que pierdas peso. Su función es ayudarte a modelar la figura y a comprimir esas áreas que te generan incomodidad de manera virtual y temporal. Si quieres perder peso debes llevar una dieta sana y hacer ejercicio físico.
Otra cosa que debes tener en cuenta es que no debes usar la faja más de ocho horas al día, ni tampoco debes dormir con ella. Puede comprimir demasiado tus órganos internos y causarte problemas a largo plazo.
También, debes colocarte la faja con la piel limpia, sin cremas. Esto a fin de evitar malos olores o que se acumulen bacterias.